“Vivir sin pasión...no es vivir”

Imagen foto_00000001Nací en La Unión, perteneciente actualmente a la Región de los Ríos, y desde muy niño sentí una atracción hacia la Armada, inicialmente debido a la lectura relacionada con la vida en el mar y además porque no tenía problema en seguir normas y reglas, como la impone de manera especial la vida militar. Debo mencionar que antes de ingresar a la Armada no conocía el mar. Sólo a los 18 años, en la segunda etapa de postulación lo conocí en Puerto Montt y luego en Talcahuano.

Ingresé el 12 de febrero de 1984 a la Escuela de Grumetes "Alejandro Navarrete Cisterna", y desde un comienzo sentí que no me había equivocado con la elección de mi vida futura; mi destino estaba en el mar. Luego de un año y medio fui transbordado a la Escuela de Operaciones, donde egresé como Marinero Afecto a Navegante Radarista. Posteriormente, cumplí embarco en el Buque Escuela "Esmeralda" y luego regresé a la Escuela de Operaciones para cursar Radarista CIC, una especialidad que me ha brindado grandes satisfacciones.

Desarrollé mi carrera en las siguientes unidades y reparticiones: Buque Escuela "Esmeralda", DLH "Blanco", DLG "Prat", LPC "Téllez", DDG "Williams", PF "Baquedano", PFG "Lynch", Centro de Entrenamiento de la Armada (CENTARM), PFG "Condell", FF "Blanco Encalada" y actualmente soy el Condestable Mayor de la Comandancia en Jefe de la Primera Zona Naval.

Completé 25 años embarcado, 21 de ellos en la Escuadra, donde desempeñé con orgullo el puesto de Supervisor CIC. Sin lugar a dudas el transbordo que más me marcó fue la FF "Blanco Encalada", donde estuve 10 años. Llegué al proyecto PUENTE II como Sargento 2º y finalicé como Condestable Mayor.

Al acceder al grado de Suboficial Mayor, la primera palabra que se me vino a la mente fue Gracias, en primer lugar a Dios, ya que la base espiritual ha sido gravitante en mi vida; gracias a mi Familia Natal, mis padres Clenardo y Sara y a mis hermanos, quienes me dieron mi formación, valores y principios; gracias a mi Familia Personal, que construí en conjunto con mi amada esposa María Eugenia, quien en 27 años de matrimonio ha sido pilar fundamental para mí. Su amor y apoyo permanente nos permite salir adelante con la hermosa tarea de educar a nuestros cuatro hijos, Rodrigo (27), Cristian (17), Claudia (15) y Andrés (10). Hoy la familia ha crecido y soy el abuelo orgulloso de una linda nieta. Y por último y no menos importante, gracias a mi Familia Naval, que son todos mis camaradas que me han acompañado en mi carrera naval desde que ingresé a la Escuela de Grumetes hasta el día de hoy.

En forma especial doy gracias a mis Maestros Radaristas, quienes me transmitieron el cariño a mi especialidad, como asesor permanente del mando. Mis padres, no sólo me enseñaron a respetar y a querer a las personas, también me lo recordaban con la siguiente frase: "Cuida a tu gente y tu gente te cuidará a ti", palabras sabias que he mantenido durante mi carrera, ya que es una buena forma de conducir personas.

Para avanzar en la carrera debemos contar con el apoyo y lealtad de nuestros camaradas y el justo reconocimiento de nuestro mando, pero eso no es gratis. Ese apoyo, lealtad y reconocimiento debemos ganarlo cada día cumpliendo con nuestro deber, con una actitud positiva permanente, y sobre todo siendo apasionados: ser apasionados es querer y creer en lo que uno responsablemente decide hacer con su vida.

Hay que complementar nuestra pasión con otra palabra clave en la obtención de nuestras metas y esa es el compromiso, o sea debemos tener pasión para querer hacer las cosas y compromiso para terminarlas, y hacerlo bien, no existe otra forma.

Creo que, "VIVIR SIN PASIÓN...NO ES VIVIR".

José Matuz Carrasco
Suboficial Mayor
Condestable
Comandancia en Jefe de la Primera Zona Naval